Por Arturo Arias-Polo / ElNuevoHerald.com – Octubre 5, 2021
El legado de Celia Cruz (1925-2003) sigue tan vivo a través de las nuevas generaciones como el día de su partida definitiva. Para comprobarlo, basta con revisar las redes sociales y el portal de YouTube, donde sus videos reciben decenas de visitas a diario como si se tratara de un ídolo de la música pop.
Celia está presente aunque esté ausente, y ahora vuelve a ser noticia gracias a la Celia Cruz Foundation, que ha decidido donar una colección de partituras de La Guarachera de Cuba a la Florida International University (FIU).
Lo que se considera un tesoro cultural de los hispanohablantes preocupados por preservar sus raíces, está conformado por 230 piezas valoradas en $259,500.00 que pertenecieron a la legendaria cantante cubana.
“El mayor deseo de Celia era asegurar que su legado perdure de generación en generación”, dijo Omer Pardillo Cid, presidente de la fundación y albacea del patrimonio de la estrella. “Donar sus partituras originales les dará a los estudiantes del futuro una manera única de estudiar su repertorio, de la manera que ella lo habría hecho”.
Conocida como La Reina de la Salsa, la cantante conquistó el mundo a lo largo de medio siglo con su potente voz, su presencia escénica y su indiscutible carisma.
Como una de las pocas mujeres que tuvo éxito en el mundo de la salsa, un universo dominado por los hombres, Celia fue más del género que la hizo famosa para incursionar, con éxito, en la música urbana. Su trayectoria abarca más de 50 producciones discográficas, películas, programas de televisión y cientos de conciertos. Entre los múltiples galardones que recibió se destacan tres Grammy, cuatro Latin Grammy y la Medalla Presidencial a las Artes.
La colección incluye notas escritas por la artista al margen de las partituras compuestas especialmente para ella y una transcripción a mano firmada de su puño y letra. Además de una pieza escrita a mano por el legendario pianista, compositor y director de orquesta Bebo Valdés, y otra de Julio Gutiérrez; así como un sinnúmero de arreglos realizados por artistas de renombre, tales como Tito Puente, Sonny Bravo, Charlie Palmieri y Joe Loco.
La colección de Cruz formará parte de la Facultad de Música de FIU, que la usará en el currículo centrado en el análisis y estudio de la composición musical, conjuntos de jazz, música instrumental, canto y cursos sobre los aspectos comerciales de la música.
También se sumará a la Colección Díaz Ayala de Música Popular Cubana y Latinoamericana en las bibliotecas de FIU, considerada la más extensa colección pública de música cubana en Estados Unidos.
Por último formará parte de CasaCuba, un centro cultural dedicado a la cultura cubana que contará con exposiciones interactivas y presentaciones de expertos. El centro comenzará a construirse en el 2022.
María Carla Chicuén, directora ejecutiva de CasaCuba afirmó que “Celia Cruz está en el panteón de los artistas que llevaron la música cubana a todo el mundo y como centro dedicado a preservar la cultura cubana” se sienten muy agradecidos de que FIU los haya escogido como el destino de esta extraordinaria colección.
“Las bibliotecas de FIU agradecen la donación de la colección de partituras de Celia Cruz, un recurso extraordinario para nuestros estudiantes, la comunidad de FIU y otros”, apuntó Anne Préstamo, decana de bibliotecas del centro de estudios.
Para Karen S. Fuller Veloz, directora de la facultad de música, la colección permitirá aprender sobre La Reina de la Salsa y sus aportes a los estilos musicales afrocubanos del siglo XX por medio de materiales originales poco comunes”.
